LAS TORRES DE FALS

Las torres de Fals constituyen uno de los monumentos militares y religiosos más vistosos y conocidos de la comarca. Las torres del castillo, junto con la antigua iglesia parroquial de San Vicente y la rectoría, se alzan separadas por un barranco que drena el torrente de Fonollosa.

Del antiguo castillo, que aparece documentado el año 995, probablemente sólo queda la torre. Adosado a la torre se encuentra la antigua rectoría y a continuación la iglesia parroquial de Sant Vicenç de Fals. Al mediodía de esta colina donde se alza este conjunto, al otro lado del torrente, se sitúa la torre nueva, de estructura muy simple, obra de finales del siglo XIII y principios del siglo XIV.

Cercana a las Torres de Fals, en el lugar llamado Pla de Fals, se alza adosada a la masía La Torra, una torre o guardia (1033) que servía para comunicar el anterior conjunto con el resto de guardias, que por la situación hundida del castillo no las podía vislumbrar.

Durante los meses de diciembre y enero, desde el año 1977, gente de los pueblos de Fals y Rajadell se encuentran en este lugar para representar el Belén Viviente. A lo largo de un recorrido por este magnífico paraje los visitantes pueden observar más de veinte escenas que, siguiendo el texto bíblico, narran un momento concreto de la historia.